Christian Louboutin no para. Tras colaborar con
Ladurée, ahora pone su imaginación al servicio de Piper-Heidsieck, recuperando un extravagante ritual de moda en la Europa de finales del siglo XIX: beber champagne de un zapato de mujer, concretamente de bailarina.
Una costumbre entre la fantasía erótica, el fetichismo y las tentaciones del cambio de siglo. Príncipes de ciudades como Londres y San Petersburgo acudían al París de los teatros y los cabarets, y se confundían entre la multitud en búsqueda de nuevas sensaciones y experiencias. Podemos encontrar varias referencias en la literatura de la época, como la
Guide du Savoir Vivre del barón Staffe.
La idea se le ocurrió en la última ceremonia de los Oscar de Hollywood: “Después de tomar champagne en un zapato, se lo pasé a un actor muy famoso, conocido por sus interpretaciones de papeles de ‘tipos duros’, que estaba sentado a mi lado. ¡Deberíais haber visto su cara!”.
El juego, de edición limitada, incluye una botella de Cuvée Brut firmada por Louboutin y una peculiar copa de cristal de Eslovenia hecha a mano con tacón de 14 cm y la característica suela roja, aunque translúcida, que tiñe las burbujas del color de la pasión.
Estará a la venta en Colette y Lavinia (París), Selfridges&Co (Londres) Sherry-Lehmann (Nueva York) y aeropuertos internacionales a partir del 26 de octubre.